
Lo curioso es que no intento dejar... por ahora es un placer saber que esta ahí... inalcanzable... por gusto propio, por decisión propia... aun depende de mi... y eso también me reconforta.
Pero temo a lo que viene... a lo que ya no dependa de mi, cuando ya no sea mi responsabilidad no tomar lo que a simple vista me ha gustado. Es, y ya lo he dicho antes, como andar a ciegas, vendada, indiferente del futuro próximo que puede jugar en contra, como la mayoría de las veces en mi vida... Temo chocar, con la realidad que viene a paso firme...
Por ahora solo me deleito de poder tener esto, que me gusta, me hace sentir bien... ¿que importa por cuanto tiempo?
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